Entrevista a la Preceptora Carina
Colaboradores: Marina Ortiz, Carolina Mena, Florencia Aguilera, Agustina Ferrón
1. ¿Cómo conoció a la escuela?
Yo estaba en otra escuela en la 16, todavía no me había recibido, vino un maestro con más puntaje que yo, me desplazó y la directora de ahí me dijo: «andá a una escuelita acá a 3 o 4 cuadras que abrió de un muchacho que se llama Gustavo Gallo, yo ni sabía dónde estaba, que seguro necesita una maestra y me fui; había un portón grande de hierro y estaba la escuelita, en medio del barro vine caminando, entré y estaba Gustavo solo con un guardapolvo blanco y dije: «mire me mandó una directora»; y justo necesitaba una maestra y quedé.
2. ¿Hace cuánto que se inició en esta escuela?
Hace 25 años ni más, ni menos.
3. ¿Con cuántos chicos comenzó a dar clases?
Antes teníamos grados como de 25 como mucho y primero comencé como suplencia a la señorita Ale, la maestra de jardín, porque tenía angina, entonces le hice unos días. En jardín cuando los chicos salían corriendo por que decían que yo no era su maestra y corrían por todo el campo y yo corría atrás de ellos buscándolos para que Gustavo no me viera que se me escapaban los chicos (risas) y bueno siempre tuve 1ero. y 2do. grado.
4. ¿Pensó que iba a estar tanto tiempo en esta escuela?
No nunca, jamás lo pensé tampoco cuanto tiempo iba a estar en esta escuela.
5. ¿Qué la incentivo a ser maestra?
Yo no sabía que seguir, terminé la secundaria y unas amigas mías me habían anotado en el profesorado y me dijeron: «dale acompañanos, hasta que vos empieces una carrera” y fui con ellas, me anoté y me quedé paveando porque tenía 17 años, empecé con ellas a cursar y después un par abandonaron y yo continúe y luego cuando empecé a trabajar me dí cuenta que me encantaba estar con los nenes, fue de casualidad porque nunca dije: “ ay! yo quiero ser maestra”.
